¿Las novias de blanco?
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Por Nuria Pereira
Directora IECS
Área de Protocolo y Ceremonial
La moda de vestir a las novias de blanco es mas bien reciente, y nace en Francia en 1820, en pleno auge del estilo imperio.
Antes de esta fecha las novias vestían simplemente con sus mejores prendas. No habia una moda uniforme como hoy en día, donde cada año la pasarela muestra nuevas tendencias. De hecho no existía el concepo de modelo "traje de novia", ni un color especial.
Algunos vestidos de novia que se recuerdan como históricos son:
En el año 1434, la novia Arnolfini, que el pintor Van Eyck, retrata vestida con un verde luminoso.
Otra novia famosa fue María de Medicis que en 1600, se casó con Enrique IV. Dicen las crónicas que su vestido era de seda blanca bordado en hilo de oro, adornado con piedras preciosas y con una cola dorada.
Pero la primera mujer de la historia que se casó según la tradición que conocemos hoy en día, fue la famosa reina Victoria de Inglaterra, que en 1840 se caso con el príncipe Alberto de Sajonia-Gotha. La reina causó sensación vistiendo un traje de se satén natural blanco, y fue muy comentado porque introdujo un elemento nuevo que era el velo en la cabeza. Antes de esa fecha el velo se usaba solo después de la boda, no antes como hacemos hoy en día. Los comentarios en la época eran que parecía el velo de una monja, e interpretaron que la novia Victoria se presentaba ante el altar como una novia de Cristo. Pero en realidad el motivo que llevó a la reina Victoria a usar velo, fue simplemente apoyar a la industria inglesa de los encajes, que en esos momentos luchaba por su supervivencia frente a los encajes franceses. Tras esta iniciativa de la reina, el velo de las novias fue todo un furor en su época y que perdura hasta nuestros días.
Una década más tarde Eugenia, la novia del emperador Napoleón III, se casaba también con un velo blanco y un vestido de una tela poco usual, terciopelo blanco.
Como véis en el siglo XIX y principios del s. XX, eran las novias reales quienes creaban tendencia.
Y con la aparición de la máquina de coser en 1830 el traje de novia blanco se extendió con rapidez, ya que la confección abarataba costes, y la mayoría de mujeres querían al menos por un día ser reinas y vestir como tales.
El traje de novia blanco decae después de la segunda Guerra Mundial, y las novias comienzan a vestir ese día un traje negro de calidad que luego podían usar para acudir a otro tipo de fiestas y ceremonias. Este tipo de traje era negro y de seda, pero eso sí, llevaban también un velo blanco de encaje.
En los años 60, el traje de novia largo da paso al traje corto que llega hasta la rodilla, e incluso se aceptó el largo mini. Es en los años 80 cuando vuelve el vestido de princesa largo y muy adornado, con bordados y encajes, y caracterizado por en velo que llegaba en algunos casos a medir varios metros. En esta década marca estilo Lady Diana en su boda con el príncipe Carlos de Inglaterra.
En nuestros días es frecuente ver en los desfiles de alta costura como al final cuando muestran un gran traje nupcial, muchos de los diseñadores se decantan por colores creativos.
Pero hay una norma que se comparte en todas las culturas y tradiciones del mundo y es que la novia ha de lucir el vestido más importante de la boda, y que las invitadas siempre deben ceder el protagonismo absoluto a la novia.
Vía: El Correo Gallego
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